sábado, 9 de febrero de 2013

DE CIEGOS Y MUDOS


He cruzado a tanta gente indignada por que no le dejan comprar dolares o reales para irse de vacaciones y a tan poca reclamando agua potable o cloacas para que no sufran infecciones sus hijos, que siento pena al percibir, que mientras muchos sufridos están mudos por sumisión, algunos cuantos privilegiados están ciegos por ambición.

Y dicen que en una fiesta,
un mudo al baño se fue a sentar,
y de repente se vio invadido,
por un ciego que entró a orinar,

Imaginen que desespero,
de aquel hombre sin poder hablar,
viendo al otro parado enfrente,
que encima no lo sabía mirar.

Para poder compartir el baño,
se impone entonces reflexionar,
o el ciego se esfuerza en ver,
o es justicia esperar,
que repleto de razones,
un día el mudo empiece a hablar.

Lo gracioso de la historia,
si ese día fuera a llegar,
es que es fácil presumirlo,
perogrullada adivinar,
que los ciegos "pobrecitos",
no dejarían de llorar...